En 2021 el artista visual y docente Christian Rodríguez, junto al gestor cultural Gonzalo Erices, iniciaron un viaje cuyo propósito fue recorrer distintas comunas con alta ruralidad de Ñuble, generando instancias de formación en el ancestral oficio del grabado. Te presentamos sus reflexiones en torno a este viaje cultural que culminó en diciembre del 2022.
“Nos percatamos que faltan muchas iniciativas artísticas de formación en las comunas de Ñuble, en estos dos años nos encontramos con personas con mucho potencial artístico -, comenta Erices quien complementa su reflexión – nos asombramos con los resultados de personas que nunca habían tenido interacción con el grabado, con obras muy bien definidas y con gran capacidad de comprender el lenguaje y ejecutar de gran manera las técnicas del grabado”.
Luego de haber estado en Bulnes, Chillán Viejo, San Nicolás, Cobquecura; El Carmen, y Chillán, y haber compartido con adultos mayores, público infantil, juvenil, con artistas autodidactas, y gente que no sabía nada del grabado, estos dos amigos hacen un repaso de lo que significó realizar este trabajo de formación.
El proyecto se propuso en inicio generar convocatorias localizadas, siendo apoyados por instituciones que acogieron este proyecto que fue financiado por Fondart Regional; escudriñando en los territorios, se lanzaron a buscar talentos visuales.
En diciembre Christian y Gonzalo realizaban las últimas sesiones en la Escuela de Cultura Artística.
Fueron cuatro sesiones de iniciación a costo cero para sus participantes, al igual que en todas las comunas visitadas.
Sobre los cambios que ha sufrido el taller en cuanto a la transferencia de conocimientos en estos casi 2 años de desarrollo, Christian Rodríguez explica: “nos dimos cuenta que las posibilidades de exploración y creación eran mayores a las previstas, es decir el curso presenta un kit básico de 4 técnicas; creíamos q por el tiempo acotado los participantes optarían por profundizar en una, y la verdad es que no era así, ellos podían desarrollar todas las experiencias si se lo proponían”. En este sentido Erices complementa que se han dado casos en que los participantes continúan elaborando sus trabajos en sus hogares; “a la siguiente sesión nos encontramos con que sus matrices han sido muy desarrolladas, ya sea en xilografía, punta seca, Huecograbado y colografía”, que son las técnicas a las que Rodríguez hace mención.
Sobre la forma en que se ha dado la participación de las personas según territorio y rangos etarios, el gestor cultural comenta que no hay un perfil de público que se haya destacado más que otro, “de manera transversal en todos los espacios, estos cursos son abiertos a la comunidad, por lo que participan personas adultas jóvenes 20 a 45 años, cuando hemos desarrollado el taller en contextos educacionales, participan exclusivamente jóvenes de 14 a 18 años”.
Al ser consultados sobre la percepción que tienen los participantes del taller según edad o territorio argumentan: “Lo transversal de los participantes, ya sea rango etario y también en los espacios geográficos, nos ha dado un punto de vista sobre sus necesidades de expresar su creatividad en relación a los espacios en los que habitan, así también, en los más jóvenes, solo se perciben variaciones temáticas en los ejes visuales por localidades, por ejemplo en Cobquecura la tendencia es problemática medioambiental, lo oceánico, lo botánico. En Bulnes se desarrolla la arquitectura y lo anecdótico; en San Nicolás es el repertorio infantil, tales como personajes de cómics, manga, etc. En general con los públicos escolares se observa en sus procesos creativos, se inspiran en lo que ven en redes sociales y plataformas como youtube”.
Sobre la continuidad de este cruzada de formación en Ñuble, Rodríguez enfatiza que esta será siempre tendrá como objetivo cobertura y fidelización: “Es decir llegar a más territorios , y realizar el proceso como iniciación a un nuevo lenguaje, reconocimiento de las materialidad para la producción gráfica ,por la tanto es acción contemporánea en grabado para exhibir museológicamente estampas realizadas por los participantes de la región”.
En cada localidad el taller finalizó con una exposición de resultados; este hito es un reconocimiento tanto del equipo del proyecto, como de las instituciones patrocinantes, hacia las personas que llegan al final de esta experiencia, que pretende ser significativa al conectar el arte con la observación del territorio. El proyecto actualmente postula a Fondart Regional Ñuble para concretar la realización de los talleres en las comunas que quedan por recorrer.
Ambos coinciden en que el proyecto les generó muchas expectativas sobre conocer los aspectos sociales y culturales de cada territorio que se abordó, está la sensación continua de que sí se pueden realizar actividades a través de las artes visuales que produzcan un impacto relativo, de algún modo se manifiestan los primeros pasos para la creación de futuros artistas visuales y la creación de nuevas audiencias para estas disciplinas” concluye Rodríguez.
Chillán, 30 de enero de 2023